Los dos últimos fines de semana que remé, antes de Quedayak, dieron para mucho.
El primero nos encontramos con que en Pantín sólo había un pico y estaba lleno de surferos, así que decidimos ir hasta la Fragata para ver lo que la playa podía dar de sí. Lo cierto es que me gustó mucho para lo que pretendemos hacer en la quedada, pero no era una buena opción para lo que estábamos buscando ese día, así que nos fuimos a Ponzos, playa en la que yo nunca había estado y que me gustó muchísimo, pues tiene unas olas bastante limpias y que abren dando la oportunidad de surfear o botar; un buen sitio tanto para “albañiles” como para “electricistas”. Después de una horita de sesión salimos del agua para intercambiar kayaks, que ya tenía ganas de probar los de kayak surf. Fue toda una experienca, la posición para remar es diferente que la que tienes en los kayak de rodeo, en el kayak surf las rodillas van más juntas y extendidas, por lo que se pierde en estabilidad. Así que al principio no hacía más que balancearme. Aún por encima tuve que ir sin calces para los pies, o sea sin apoyo, por lo que parecía que era la primera vez que remaba.
Después de un par de paseos con la Mega Merlín con sendos vuelcos, cogí media ola, volví a volcar y en esta ocasión me tocó nadar. Momento que aproveché para probar el Mega Neutrón.
Aquí la cosa mejoró un poco por que llevaba el centro de gravedad más bajo que en la anterior. Así que puede coger un par de olitas y sentir que la velocidad de estos kayaks es muy superior a la que se puede alcanzar con los otros. Será cuestión de ir probando hasta cogerle en truquillo, aunque me da la impresión de que en pleno invierno no hay olas de calidad para estos barcos; a mi entender necesitan una ola mediana y que vaya abriendo durante mucho rato, pues en la espuma no da tanto juego como los de rodeo.
El segundo fin de semana estuvimos en Pantín, otra vez petado de surferos (menos mal que durante el invierno no se atreven, por que ahora es muy difícil encontrar un sitio tranquilo) pero como había dos picos decidimos entrar. En esta ocasión Javier llevaba la Dagger Agent 6.2, pues tenían la intención de que Luz y Esther se atreviesen a remar. Es un kayak al que le tenía muchas ganas así que, como Esther y Luz no se decidieron, me metí rápidamente en él con la intención de sentir algo radical. Las sensaciones no fueron las que esperaba por que la poca fuerza de las olas no permitía aprovechar las cualidades de este barco, que necesita una ola potente para botar y sacarle figuras. Pero como el mar no parecía querer jugar tuve que cambiarme a mi querida G-Force con la que pude surfear un rato hasta que me cansé y me fui al pico grande con los surferos. Ahí sí que me divertí haciendo varias olas con fuerza en las que pude surfear y botar haciendo algún blunt y un par de intentos de cartwheel.
Al acabar nos fuimos a comer para hablar sobre Quedayak y repartirnos las tareas de los últimos detalles de la organización.
El primero nos encontramos con que en Pantín sólo había un pico y estaba lleno de surferos, así que decidimos ir hasta la Fragata para ver lo que la playa podía dar de sí. Lo cierto es que me gustó mucho para lo que pretendemos hacer en la quedada, pero no era una buena opción para lo que estábamos buscando ese día, así que nos fuimos a Ponzos, playa en la que yo nunca había estado y que me gustó muchísimo, pues tiene unas olas bastante limpias y que abren dando la oportunidad de surfear o botar; un buen sitio tanto para “albañiles” como para “electricistas”. Después de una horita de sesión salimos del agua para intercambiar kayaks, que ya tenía ganas de probar los de kayak surf. Fue toda una experienca, la posición para remar es diferente que la que tienes en los kayak de rodeo, en el kayak surf las rodillas van más juntas y extendidas, por lo que se pierde en estabilidad. Así que al principio no hacía más que balancearme. Aún por encima tuve que ir sin calces para los pies, o sea sin apoyo, por lo que parecía que era la primera vez que remaba.
Después de un par de paseos con la Mega Merlín con sendos vuelcos, cogí media ola, volví a volcar y en esta ocasión me tocó nadar. Momento que aproveché para probar el Mega Neutrón.
Aquí la cosa mejoró un poco por que llevaba el centro de gravedad más bajo que en la anterior. Así que puede coger un par de olitas y sentir que la velocidad de estos kayaks es muy superior a la que se puede alcanzar con los otros. Será cuestión de ir probando hasta cogerle en truquillo, aunque me da la impresión de que en pleno invierno no hay olas de calidad para estos barcos; a mi entender necesitan una ola mediana y que vaya abriendo durante mucho rato, pues en la espuma no da tanto juego como los de rodeo.
El segundo fin de semana estuvimos en Pantín, otra vez petado de surferos (menos mal que durante el invierno no se atreven, por que ahora es muy difícil encontrar un sitio tranquilo) pero como había dos picos decidimos entrar. En esta ocasión Javier llevaba la Dagger Agent 6.2, pues tenían la intención de que Luz y Esther se atreviesen a remar. Es un kayak al que le tenía muchas ganas así que, como Esther y Luz no se decidieron, me metí rápidamente en él con la intención de sentir algo radical. Las sensaciones no fueron las que esperaba por que la poca fuerza de las olas no permitía aprovechar las cualidades de este barco, que necesita una ola potente para botar y sacarle figuras. Pero como el mar no parecía querer jugar tuve que cambiarme a mi querida G-Force con la que pude surfear un rato hasta que me cansé y me fui al pico grande con los surferos. Ahí sí que me divertí haciendo varias olas con fuerza en las que pude surfear y botar haciendo algún blunt y un par de intentos de cartwheel.
Al acabar nos fuimos a comer para hablar sobre Quedayak y repartirnos las tareas de los últimos detalles de la organización.
Además de remar aproveché un sábado para volar la radsail pro3, me coincidió la marea alta y muy poco espacio, así que tuve que conformarme con volar en estático. Lo bueno fue que un fotógrafo aficionado me hizo esta foto.
Podéis ver más fotos suyas en su Galería de flickr. Tiene algunas muy buenas. Gracias por la foto, Cliofix!!